Recuerdo aquel sábado de amanecida estudiando, al medio día tenía un examen en la universidad. Eran 8:30 a.m. y comencé a oír a lo lejos el ruido de silbatos, tapas de ollas y gente gritando y reclamando. Salí por el balcón de mi habitación. Cuando llegué a la ventana, mis ojos alcanzaron a ver a una veintena de mujeres muy robustas, con vientres tan grandes que podía verlos exclamar auxilio - casi con la misma desesperación con la que sus propietarias exclamaban diciendo a viva voz ¡leche si, avena no!… ¡queremos leche!...
Al ver su enorme banderola y sus cartulinas, leí que eran integrantes de “La Unidad Ejecutora de Programa Social Vaso de Leche”. Me pregunté entonces ¿Porqué esas robustas señoras, piden leche?, ¿porqué no quieren avena?, ¿porqué no pueden ser el comité del vaso de avena?, ¿Qué puede llevar a una persona a salir a gritar a la calle para EXIGIR un bien que les es dado de manera gratuita, y no recibir lo que se les da?, ¿Cómo pueden esas robustas señoras, probablemente con más grasa que las mismas vacas reclamar por leche?, ¿Qué puede llevar a un pueblo, o parte de él a salir a las calles para gritar por comida gratis?.
Pensé, entonces ¿Porqué mis padres tenían que hacer actividades o vender chanfainita para costear mi universidad?... Tal vez saliendo a la calle a gritar que quería estudiar gratis lograba algo… así como lo hacían esas señoras que exigían leche en vez de avena. ¿Por qué nos hemos acostumbrado algunos peruanos a estirar la mano y exigir sin trabajar?, ¿Por qué el gobierno creó esta suerte de programa que alimenta con los impuestos que todos pagamos a estas mujeres tan enormes y robustas?, ¿Porqué SE UTILIZAN 363 MILLONES DEL RECURSO PUBLICO PARA DAR DE COMER A LOS DEMÁS?, ¿Porqué con esos 363 MILLONES EL GOBIERNO NO CAPACITA A LA GENTE PARA QUE EMPIECEN A TRABAJAR?, ¿Porqué tenemos que pagar todos los peruanos con nuestros impuestos, la falta de planificación familiar en estas robustas mujeres?, ¿Porqué no se INVIERTEN ESOS 363 MILLONES DE SOLES en enseñar a esas robustas mujeres a ordeñar, al menos una vaca, pues la leche que reclaman es de tarro y de marca?, ¿porqué estamos algunos peruanos acostumbrados a ser becerros y prendernos de la teta sin soltarla?, ¿PORQUÉ NO EXIGIMOS QUE NOS CAPACITEN PARA SER VAQUEROS, QUE NOS ENSEÑEN A ORDEÑAR, QUE APRENDAMOS A SUDAR, QUE NOS EDUQUEN PARA NO MENDIGAR?.
¿PORQUÉ LA CLASE POLÍTICA PREFIERE TENER A LA GENTE PIDIENDO COMIDA Y NO EXIGIENDO EDUCACIÓN?, ¿QUÉ NOS ESTÁ PASANDO PARA EXIGIR COMIDA EN LA MESA GRATIS Y NO UNA FORMACIÓN DIGNA?...
Muchos son las preguntas que llegaron a mi mente al ver aquella escena, obviamente ese día no tomé leche, fui en ayunas a dar mi examen. Pero aquel día me quedé pensando, ¿si es gratis, con qué cara reclaman?, yo hubiera querido hasta la avena… me conversaba el estómago - que hablaba más fuerte que yo…
Solo llegué a una conclusión esa mañana: “JAMAS EN MI VIDA, ELEGIRIA SER BECERRO, ANTES QUE LLEGAR A ESO PREFIERO APRENDER Y SER VAQUERO”.
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